Pero es irónico que muchas de ellas tienen a los mismos comensales cualquier otro día pero no se libran y otras se pasan días temblando ante la perspectiva de que llegue esa noche y tener que soportar a LA CUÑADA, morderse la lengua ante los comentarios punzoñosos de LA SUEGRA o aguantar a las groserías de LOS SOBRINOS ( o cualquier otros familiares, no os vayáis a pesar que la tengo tomada con mi familia politica, que mi hermana se las trae) aunque yo soy de esas que soportaría a todos los sobrinos maleducados del mundo con tal de no tener que escuchar un solo chiste en toda la noche.
El día siguiente, a pesar de haberte ido a dormir con una sonrisa de pámfila en los labios por eso del espiritu de la navidad se te borra de un plumazo al ver el trabajazo que te espera en la cocina. Y otro día más metida en faena....
Y llega Papá Noel, o los Reyes, o lo que se tercie y te hace ilusión y todo, oye. Hasta que algun niño te despierta a las siete de la mañana para mirar debajo del árbol los regalos que has puesto solo cuatro horas antes porque no había manera de que se durmiera el joio. En camisón además, con un frio que pela, con lo bien que se está en la camita... Y te llenan el salón de pedacitos de papeles de colores, tantos que hace que se te pierda algún regalo (¿no os ha pasado nunca?). Después de abrir los tuyos y de verlos de refilón viene la fase de montaje e ingeniería que viene a ser sacar a todos los juguetes de sus cajas que estan muchas veces hasta atornillados ( o los ladrones han mejorado mucho o los de marketing han visto muchas veces "Toy Story"), montarlos todos con unas instrucciones que requieren un master en ingeniería aeroespacial mientras un niño te grita en la oreja que te des prisa que quiere probarlo y buscar pilas por toda la casa porque se te ha olvidado comprarlas.
Pero rapidito, que otra vez es fiesta y familiar además y hay que hacer una suculenta comida para recibir a la familia que vienen en tropel para traer más regalos a los niños que también habrá que montar mientras tú haces planes mentales de donde vas a meter tanto trasto.
Y ¿que hacen "los hombres" mientras? ¿Mientras tu cocinas, recoges a contrareloj porque va a venir LA SUEGRA y te peleas con los papeles de regalo?. Jugar, jugar y jugar con los niños mientras esperan a que este hecha la comida.
Si es que las Navidades las inventó un hombre seguro.
De todas formas y con eso de que el espíritu navideño se contagia os deseo a todas una feliz entrada de año y que el 2013 aunque dicen que pinta muy mal realmente no sea para tanto y que os tenga reservado solo cosas buenas.
Y ahora me voy a la cocina corriendo, que no me da tiempo.
Besos